Y PASTRANA AHÍ…
Eligio Palacio Roldán
Había una vez, hace más de 20 años, un candidato a la presidencia de Colombia, llamado Andrés Pastrana, que luchó por derrotar a otro candidato, financiado por el narcotráfico, y no pudo; corría el año de 1994 y Colombia se debatía como ahora, bueno, con algo más de resistencia, frente a la popularización de la cultura traqueta y la mimetización de sus representantes entre la clase dirigente del país. Después, en 1998, llegó a ser el presidente de la república, pero esto le costó caro; fue la consecuencia de desafiar a un personaje con inmenso poder, en los medios de comunicación. Desde entonces, ha sido víctima de ataques continuos (ver MATONEO CONTRA ANDRES PASTRANA http://wp.me/p2LJK4-mE).
Y Pastrana fue presidente, por cuatro años, en una de las peores crisis de nuestra historia, generada, en gran parte, por el desgobierno de Ernesto Samper; fue un tiempo para recomponer las deterioradas relaciones internacionales, rehacer una maltrecha economía, y tratar de luchar con una guerrilla fortalecida; en el primer aspecto, el expresidente logró frutos, en los otros dos fueron Uribe y Santos los que tuvieron las recompensas y el país, ayudado por los medios de comunicación, no supo quién había sido el gestor de los triunfos.
Después, a pesar de los desplantes de los gobiernos de Alvaro Uribe, Juan Manuel Santos y de cientos de ciudadanos sin memoria, Pastrana permaneció al tanto de lo que sucedía en el país, interviniendo, de manera afortunada o desafortunada, en la vida de Colombia y de los colombianos; pero más allá de la calidad de la intervención, el expresidente se fue convirtiendo en una especie de símbolo de la decencia en la política, una característica casi ausente de nuestro sistema “democrático”. Su última actuación, el viaje a Venezuela, para respaldar al líder opositor Leopoldo López, quedará para la historia como un acto de heroísmo ante una comunidad internacional maniatada por el poder “sobrenatural” de Chávez; poder que ejerce el fallecido expresidente venezolano sobre el gobierno Santos en una dimensión “desconocida” y desconcertante.
Quedará para la historia, también, la frase del expresidente “Lamento que los demócratas de América Latina hayan dejado sola a Venezuela” quien lo creyera, ningún líder “democrático” defiende la democracia en el vecino país, salvo Pastrana, un “tuerto” para algunos, que va en camino de ser rey, en una América de ciegos; tan, pero tan, ciegos, que tienen como presidente de Unasur, a un expresidente que vendió el alma, primero, al narcotráfico y luego al Chavismo.
ANTES DEL FIN
UNO.
El Viajero, la sección de www.eligiopalacio.com, relata las vivencias de un ser que regresa a la vida después de muchos años de estar muerto; al personaje, todo le parece muy extraño. ¿Qué pensaría Chávez si resucitara y viera a su antiguo enemigo, Juan Manuel Santos, doblegado ante el Chavismo?
DOS
Comenzó el juego de la política por las elecciones locales en Colombia; otra vez veremos las alianzas “programáticas” más extrañas, la corrupción y la compra venta de votos por todo el territorio nacional y el despilfarro de dinero a manos llenas. Será un año de fiestas, música y licor, gratis, como parece gustarnos a los colombianos.
TRES
Me decía un alcalde que cual era el problema en recibir el 15% por los contratos asignados, que ese dinero lo perdían los contratistas… No entiende, este alcalde, y creo que ninguno en el país que “esos regalitos” se traducen en mala calidad de las obras y/o sobrecostos que pagamos todos los colombianos… Nos atracan y cantamos, tomamos, festejamos y… votamos.